viernes, 2 de enero de 2009

Ejercicio en honor de Jesús Niño

Este ejercicio se inició en la Reforma de Turena, usado especialmente en el noviciado y en el estudiantado. Se difundió luego en toda la Orden.


A esta práctica se unía una especial devoción a la Virgen del Carmen. Cada mes (o cada semana) se sorteaba entre los novicios o los estudiantes, el nombre del “celador” de la estatua de Jesús Niño y las de la Virgen, tarea de tales celadores era comprometerse durante todo el mes (o semana), en honrar tales imágenes en su propia habitación y de practicar mejor la vida común.


Existió un ritual específico para el sorteo y el paso de las imágenes de un celador al siguiente; en este contexto se hacían a menudo procesiones dentro del noviciado o del estudiantado, con exhortaciones adecuadas al caso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario